Retomamos nuestro blog luego de unas largas vacaciones de las labores de editor general, ha sido un tiempo para repasar lecturas y contrastar ideas a la luz de diversos autores, pero también de amigos y personas cercanas, estén o no en comunión con nosotros.
Las ideas tienen una gran importancia en nuestras vidas, de manera personal y colectiva: nos impulsó y justificación para nuestras acciones o proyectos. Nos permiten unificar grupos sociales en torno a objetivos compartidos o son ideas las que pueden generar división, sea de una familia, un grupo de amigos o una sociedad entera.
Los intelectuales tienen una labor muy importante en la generación y difusión de ideas en el marco de las sinergias sociales que van dando identidad y contenido a nuestros procesos de deliberación pública. Son ideas las inspiran y justifican decisiones de gobierno, políticas públicas, agendas legislativas y es muy recurrente que en los tiempos actuales se aparquen las ideas en un supuesto beneficio de los resultados.
En una política que va ha ido del individualismo tecnocrático al identitarismo sentimental, recuperar las ideas significa revalorizar la política como actividad de servicio y posibilidad de trascendencia. Por eso, queremos dedicar una edición de nuestro blog a las ideas, intelectuales y el trabajo político y contamos tres reflexiones para ello.
El primer texto proviene de nuestra directora de proyectos, Adriana Rodríguez, y expone una verdad irrefutable: las ideas tienen consecuencias y, a partir de ahí, la necesidad de una alternativa cultural en el Perú. Es importante resaltar el rol que se otorga a las ideas como elemento de lucha contra el totalitarismo, puesto que en el nihilismo se genera una dictadura del relativismo mismo.
Luego tenemos un texto de María José Corzo, abogada que se ha sumado al staff de voluntarios de nuestra organización y a quién podrán leer de manera cada vez más recurrente en nuestro portal de opinión. Ella expone una reflexión sobre intelectuales y política en el Perú, resaltando la necesidad de vincular el trabajo de las ideas a la esfera política para darle orientación hacia la búsqueda del bien.
Finalmente, la contribución internacional viene de la mano de Juan Diego Molina, doctorando de la Universidad de Navarra, que nos expone la importancia que tienen los intelectuales para la política reflexionando sobre la necesidad de tener parámetros fundamentados en ideas sólidas para tener una mejor comprensión de nuestro mundo, sobre todo en un contexto de hiper politización, fake news, falta de credibilidad e inestabilidad de nuestro modelo de convivencia.
